Poetas y viajeros italianos han atravesado los mares arribando al nuevo mundo de a cientos, principalmente a Argentina, en los últimos dos siglos, soñando con nuevos comienzos. Algunos, han echado raíces en esas tierras dejando parte de su propia historia de este lado, otros han regresado, y muchos han cruzado fronteras de modo incorpóreo, a través del tiempo, sembrando conocimiento a través de sus obras.
En Florencia estamos convencidos de que además de compartir sagas familiares, recetas y palabras, con los argentinos se comparte un sentimiento. Uno de nuestros héroes populares se llama Gabriel, nació en Argentina y acá vistió con honra nuestra camiseta púrpura, la hizo grande. El vivió entre la gente y caminó por nuestras calles durante 9 años, ganó una Copa Italia con nuestros colores. El Rey León, Batigol, lo conocés? Uno de los mejores delanteros de la historia del fútbol, un ídolo también de nuestra ciudad (incluso ahora, ante el simple hecho de escuchar su nombre a los florentinos nos brillan los ojos).
Ayer crucé Ponte alle Grazie de San Niccolò a Santa Croce. En la esquina con Lungarno delle Grazie vi una obra del artista callejero “Blue”: un Batistuta con el pelo largo y una mascara de buceo se destaca en la pared. A una cuadra de ahí, en la esquina entre Via Magliabechi y Corso Tintori, hay un bar al que las mujeres han peregrinado durante años a admirar a su doble. El se llama Domenico y se encuentra detrás del mostrador. Si pasás por ahí, no podés perderte de conocerlo y probar uno de sus buenos cafés acompañado de un croissant francés con mantequilla para el desayuno. Es genial.
Si la nostalgia de viaje te sorprende, en lugar del café podés comprar yerba mate organico en Villaggio dei Popoli, via de Pilastri 45r (siempre en Zona Santa Cruz). Si decidís ordenar un Fernet con Coca-Cola en los bares podrías pagarlo mucho más caro de lo habitual, en su lugar, podés encontrar una botella a muy buen precio en cualquier supermercado del centro. Llegar a Italia y no probar el vino o la cerveza artesanal es como viajar a Argentina y no degustar un buen asado. Partiendo de la Piazza Signoria, frente al Palacio Viejo, podrás admirar la réplica del David de Miguel Ángel y otras esculturas imperdibles para los apasionados de la mitología greco-romana. A partir de ahí, tomando Vía de Neri, te encontrarás con L’Antico Vinaio en el número 65 / R, donde podrás degustar una copa de Chianti al aire libre, acompañado de algún canapé o una schiacciata con salame, mientras mirás gente parar charlando por las aceras.
Una visita obligada para cuando vengas a Florencia es Piazza del Duomo: una verdadera ventana al pasado en un gran museo al aire libre. Quizá, estos edificios llenos de historia podrían ser el lugar más antiguo que jamás pises: La catedral de Santa María del Fiore, la Cúpula de Brunelleschi, el campanario de Giotto, el Baptisterio, la antigua basílica de Santa Reparata y el Museo se pueden visitar con un solo boleto que cuesta 15 euros.
Si sos deportista, y no querés dejar tu entrenamiento de lado, Florencia te ofrece una magnifica opción: hacer tu rutina diaria corriendo entorno a los antiguos muros medievales, plazas renacentistas y puentes que han resistido los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial. Una ruta impresionante se extiende por ambas orillas del río Arno y se eleva hasta el Piazzale Michelangelo (Un romántico lugar que no querrás perderte de visitar cualquier tarde, a eso de las siete, cuando los músicos de la calle cantan sus canciones).
Stefano, un guía lugareño y entrenador personal, acompaña a los viajeros desde la primera luz del día con el Jogging Tour - informaciones y reservas.
Esta es nuestra propuesta. Podemos contar con muchísima alegría que nos hemos convertido en amigos de muchos de los argentinos que se han alojado en nuestros apartamentos. Adriana por ejemplo, que describe así en Tripadvisor su experiencia: Alquilamos el departamento Peonia que está a pocos metros de la iglesia Santa Crocce. Pudimos visitar caminando casi todos los sitios turísticos. La ubicación es excelente. El departamento es grande, cómodo, tranquilo y bien decorado, las fotos no engañan. Con todas las cosas necesarias para pasar una estancia agradable. El Wi-Fi funcionaba perfectamente. No tuvimos que comprar elementos de limpieza, también había té, café, aceite de oliva, sal etc. La encargada fue siempre muy amable y nos brindó muchísima información que fue muy útil. También nos consiguió un taxi para ir a la estación. Cerca hay un supermercado que vende comida lista para llevar, muy rica y a precios convenientes.
Para reservas y recomendaciones sobre vacaciones perfectas en Florencia, Acacia the Perfect Holiday te espera con gusto.
Vanesa Stati (argentina), Francesca Ronconi (tana)